Historia de Menorca:
http://www.portalcultura.mde.es/cultural/fortificaciones/ibalears/fortificacion_94.html
Menorca ha sido, desde la prehistoria hasta tiempos muy recientes,
lugar de paso de distintas culturas a causa de su situación estratégica en el
centro del Mediterráneo occidental, que ha propiciado que desde los albores de
los tiempos diferentes pueblos hayan codiciado la isla como puerto de escala y
refugio.
Menorca vive los momentos más trágicos de su historia con las
incesantes incursiones piráticas que producen una gran inestabilidad a sus
habitantes y que tendrán su punto culminante con la destrucción a causa de los
ataques turcos de Maó (1535) y Ciutadella (1558). La isla estuvo a punto de
quedar abandonada hasta el fuerte de Sant Felipe a la entrada del Puerto de Maó
y algunas de las torres de defensa de la costa como la de Sant Nicolau en
Ciutadella.
Menorca, por su posición estratégica en el Mediterráneo occidental y también
por la seguridad de refugio que ofrecía, fue objeto de ambición política de
Gran Bretaña, Francia y España.
****** Ocupación inglesa de 1708 durante la Guerra de Sucesión con
el pretexto de mantener la isla para el archiduque Carlos de Austria condujo a
la cesión de Menorca a Gran Bretaña en virtud del Tratado de Utrech
(1713).
******Tras el desembarco militar francés de 1756, Menorca dependió del
gobierno galo hasta 1763. Al terminar la Guerra de los Siete años, el Tratado
de París (1763) obliga a Francia a devolver la isla a los ingleses, dando
inicio a la segunda dominación británica.
****** El desembarco hispano-francés de 1781-82, abre un breve período
de gobierno español, que termina en 1798 cuando los ingleses recuperan la isla.
La tercera y última dominación británica termina en 1802, por el Tratado de
Amiens, devolviendo Menorca a España.
Menorca era una tierra codiciada por las potencias extranjeras, que
había quedado sin defensas frente a enemigos exteriores por la orden de
demolición del Castillo de San Felipe y el castillo de San Antonio, dictada en
1782 por Carlos III.
Pero fue Isabel II quien mando fortificar en 1848 el puerto de Mahón,
Menorca, desprovisto de protección.
En
1848 el General Ramón Zarco del Valle, ordenó la urgente construcción de una
batería de campaña en la Mola. Posteriormente, se encargó en 1850 al Coronel de
Ingenieros Celestino del Piélago, un proyecto de fortificación permanente.
La fortaleza recibió el nombre de la Reina Isabel II y se inauguró en
1852, aunque fueron necesarias nuevas obras para convertir la Mola en una
fortaleza de primer orden. Una vez terminada la ampliación inicial, que incluía
la excavación de fosos y la construcción de nuevos edificios en los
acuartelamientos, la Mola recibió la visita de Isabel II.
Durante muchos años, centenares de menorquines trabajaron en estas
fortificaciones. La fortaleza representó, para Menorca, la llegada de grandes
invasiones del Estado y su construcción dio trabajo a gran número de operarios,
de forma que no sólo cortó buena parte de la emigración, sino que propició la
llegada de inmigrantes. En 1854 trabajaban en la Mola 900 operarios y a
principios de 1863, ya sumaban 1831, de los que 656 eran menorquines.
El gasto diario se evaluaba entre 20.000 y 30.000 reales. Las obras se
prolongaron durante décadas, aunque hubo interrupciones por el precario estado
de las finanzas del Estado.
En Septiembre de 1860, la Reina Isabel II,
intrigada ante la gran cantidad de reales órdenes que firmaba cada semana para
autorizar los pagos de la construcción de la fortaleza, decidió trasladarse a
Menorca acompañada de su esposo, Antonio María Claret, que posteriormente fue
elevada a los altares para visitar personalmente La Mola.
Durante la visita de Isabel II, el temporal motivó que la hija de
Fernando VIII tuviera que desembarcar en el puerto de Ciudadela, cuanto todas
las autoridades la esperaban en el puerto de Mahón. En el transcurso del
recorrido, por las espaciosas instalaciones, fue cuando la Reina pronunció la
famosa frase relativa a “si los peldaños de La Mola eran de oro, por el
elevadísimo coste que había significado su construcción”.
Interesante reportaje que recomiendo ver sobre la historia de la fortaleza:
http://www.museomilitarmenorca.com/la-mola/
La fortaleza, también llamada de Isabel II, se inauguró en 1852
aprovechando la visita de le reina a la isla, pero sin estar terminada, (algo
que tardaría aún unos 25 años), debido a las difíciles condiciones del terreno,
a las inclemencias de los temporales, y en especial, a los avances que sufrió
la artillería, lo que provocó que se realizaran diferentes modificaciones para
conseguir adaptar la fortificación a las innovaciones que iban surgiendo.
En el año de inauguración de esta fortaleza 1852 se acuñaron una serie
de monedas con ese mismo año, como ejemplo veremos una pieza de 1 real.
Reina: Isabel II
Año: 1852
Valor: 1 real
Ceca: Madrid
Grabador: Remigio Vega
Imágenes de la Fortaleza: