sábado, 14 de junio de 2014

Medalla Guerra de África contra Marruecos

Isabel II

22 de octubre de 1859 – 26 de abril de 1860

La prensa , principal medio de comunicación social en la España de la segunda mitad del siglo XIX, se posicionó claramente a favor de la intervención en África,“ reflejaba  vivísimamente el  sentimiento del pueblo”,escribía Emilio Castelar, en 1859. La guerra fue uno de los acontecimientos que más ríos de tinta hizo correr en España, pues el entorno periodístico, acababa de descubrir en las guerras un filón para atraer a numerosos lectores, cada vez más interesados por todos sus pormenores. Por ello se necesitaban profesionales competentes que presenciaran los hechos y acontecimientos en directo, con la capacidad literaria suficiente para escribirlos bien.
De este modo comienza a dibujarse la figura de “el corresponsal de guerra”.

Entre los años 1843 y 1844 las ciudades de Ceuta y Melilla sufrieron una serie de ataques por parte de fuerzas marroquíes. En 1844 un agente consular español fue asesinado en Marruecos. El general Narvaez, presidente del gobierno español, protestó ante el sultán Muley Soleiman de forma tan enérgica que casi se llegó al borde de la guerra. Inglaterra medió en la disputa y logró que el sultán firmara en Tanger un acuerdo con España el 25 de agosto de 1844, que fue posteriormente ratificado por el Convenio de Larache el 6 de mayo de 1845, en el que, entre otros acuerdos, se fijaron los límites de la ciudad de Ceuta.



A pesar de la firma del convenio, las ciudades de Ceuta y Melilla continuaron sufriendo constantes incursiones por parte de grupos marroquíes. 
El gobierno español decidió dar un golpe de efecto para frenar los ataques marroquíes e invadió sin previo aviso las islas Chafarinas en 1848.
Las islas Chafarinas se encuentran a 27 millas al este de Melilla. Habían estado desabitadas desde siempre, siendo consideradas como "res nulius" o tierra de nadie. El general Narvaez ordenó su ocupación, por lo que el 6 de enero de 1848 tropas españolas procedentes de Melilla y Málaga desembarcaron en el archipiélago, adelantándose con ello en seis horas a los planes de ocupación que los franceses iban a poner en ejecución.

Según Rafael del Castillo en 1859 la campaña de África se inicia con vivas y tiros el 19 de noviembre, cumpleaños de Isabel II.

En 1859, época en la que Leopoldo O'Donnell  político de profesión y soldado de carrera se encontraba al frente de España, un país que, desde hacía varios años, se había acostumbrado ya al cambio de mandatarios y a los pronunciamientos militares. 

La fragilidad del poder no era el único problema que resonaba en la cabeza de O'Donnell. Y es que, este militar estaba también arto de que los territorios españoles ubicados en África (Ceuta y Melilla) siguieran sufrieran ataques constantes por parte de grupos armados locales. En todas esas cosas debería estar pensando este general cuando, en agosto de 1859, una partida marroquí de una cabila cercana no tuvo mejor idea que asaltar espada y fusil en mano a unos operarios hispanos cerca del territorio ceutí.

Según otras opiniones consideran al propio O'Donnell el instigador de la Guerra de África de 1859 - 1860, con la que pretendía mantener ocupado a un ejército demasiado acostumbrado a los pronunciamientos, unificar los diferentes partidos políticos y recuperar el prestigio de España como nación.

El presidente del gobierno pidió autorización a Francia e Inglaterra para declarar la guerra al territorio africano. Con un «oui» gabacho y un «yes» británico bastó, y el 22 de octubre de 1859 comenzó la Guerra de África.Tomando Ceuta como base de operaciones, se fijan los objetivos de Tetuán y Tánger. 


El 4 de febrero de 1860 tras de varias batallas con victoria, 25.000 soldados españoles al mando del general O'Donnell lograran tomar el campamento marroquí del comandante Muley Achmed, el cual estaba protegido por 35.000 musulmanes y defendía Tetuán. Sin embargo, ya fuese por un golpe del destino o por el buen hacer de la artillería hispana, lo cierto es que no sólo se logró el objetivo, sino que aquella victoria cambió el destino de la que, a la postre, fue denominada como la Guerra de África, pues permitió a las tropas de nuestro país entrar en una de las ciudades enemigas de mayor importancia estratégica.
A primera hora de la tarde, Muley-Ahmed, pálido como la muerte, entró en Tetuán al galope gritando “Todo está perdido, Tetuán es de los cristianos”.

Entrada de las tropas españolas en Tetuán 



Guerra  de  África

22 de octubre de 1859 – 26 de abril de 1860
Lugar: Norte de Marruecos
Resultado: Victoria española
Reino de España-Sultanato de Marruecos

Generales Españoles
Leopoldo O'Donnell, Segundo Díaz Herrero, Juan Prim y Prats
Juan Zavala, Antonio Ros de Olano

Contra ejército marroquí
Muley el-Abbás

Ejército  Español
40.000 soldados, 65 piezas de artillería, 41 navios

Ejército Real Marroquí
  140.000 efectivos

Bajas
4.000 Españoles - 6.000 Marroquíes

Anécdota:
De esta guerra salieron los leones de bronce que actualmente hay en el Palacio de las Cortes, ya que las tropas españolas incautaron varios cañones en esta Guerra contra Marruecos como trofeo de guerra. El Gobierno decidió utilizar ese bronce como materia prima para la pareja de leones del Congreso.
Ponciano Ponzano diseñó los dos imponentes felinos que hoy conocemos y que fueron fundidos en Sevilla en 1866.
Fueron bautizados como los héroes de la Guerra de Independencia Daoíz y Velarde.


Con motivo de ese acontecimiento se labraron unas medallas conmemorativas haciendo alusión a esta guerra.

Descripción:

Anverso: cabeza coronada de la Reina, a la izquierda, con el pelo recogido y diadema, leyenda ISABEL SEGUNDA REYNA DE LAS ESPAÑAS.

Reverso: GUERRA DE AFRICA CONTRA MARRUECOS, en el centro, dentro de una orla floreada, en catorce líneas:  QUE SE TASEN Y VENDAN TODAS MIS JOYAS SI ES NECESARIO AL LOGRO DE TAN SANTA EMPRESA. QUE SE DISPONGA SIN REPARO  DE MI PATRIMONIO PARTICULAR PARA EL BIEN Y LA GLORIA DE MIS HIJOS; DISMINUIRE MI FAUSTO; UNA HUMILDE CINTA BRILLARA EN MI CUELLO MEJOR QUE HILOS DE BRILLANTES SI ESTOS PUEDEN SERVIR PARA DEFENDER Y LEVANTAR LA FAMA DE NUESTRA ESPAÑA.


Medalla editada (diseñada) por:  Francis Massonet
Grabador: Gerbier, Louis Adolphe ( grabador de la escuela italiana ).


Canto: Liso

Peso:  84 gr.
Diamm.: 57 mm
Metal Blanco






















Bibliografia:

http://spanish.colorado.edu/sites/default/files/images/stories/pdf/colorado_review_pdfs/Volume_4/004010Rueda.pdf
http://www.laalcazaba.org/la-guerra-de-africa-1859-1860-cronicas-literarias-y-relatos-pictoricos-por-alfredo-pastor/
http://www.abc.es/historia-militar/20140120/abci-tetuan-donde-ejercito-espanol-201401172155.html
http://conpolvoradelrey.blogspot.com.es/2012/03/la-primera-guerra-de-africa-1859-1860.html
http://www.mundohistoria.org/blog/articulos_web/los-466-voluntarios-catalanes-la-primera-guerra-africa-1859-60
http://www.zumalakarregimuseoa.net/actividades/investigacion-y-documentacion/la-guerra-de-africa-1859-1860-nueva/la-gerra-de-africa-y-el-arte
http://www.abc.es/20111025/medios-redes/abci-leones-congreso-bitacoras-201110251126.html











3 comentarios:

  1. impresionante Javier, es increíble la de historia que nos puede contar una simple medalla, enhorabuena por tan excelente blog.
    Un abrazo.

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  2. A si es Rafael, es increible la historia que nos puede contar una moneda, una medalla o bien un boton, y todo forma parte de la historia.

    Un saludo y me alegra que te guste y te sirva de ayuda.

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  3. Hola tengo una medalla de estas encontrada en Argentina, que calor podría tener? Gracias saludos

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